Fuente: Los Ranchos de Pascuas en Tinajo
Nicolás J. Lorenzo Perera
Mª Dolores García Martín
Del mismo modo que había vecinos que acostumbraban a ir al mar a pescar y a mariscar, otros se dedicaban a capturar pardelas en las fugas más o menos cercanas al pueblo.
Hubo también ambulantes que se encargaban de vender las pardelas que otros cazaban, al parecer en el islote de Alegranza. Las portaban en el interior de dos cestas dispuestas sobre el burro.