Fuente: Los volcanes de Chimanfaya
Santiago Cazorla León
Pero, leyendo este milagro de la Virgen en Mancha Blanca de 1735, nos preguntamos; ¿Qué razón movió al Padre Franciscano, que misionaba en la Ermita de San Roque de Tinajo, a no sacar en la procesión de rogativas al Patrono como estaba mandado sino que sacó el cuadro de Los Dolores recién adquirido?
El Cabildo en la vacante, el 30 de octubre de 1730, escribió a Don Ambrosio Cayetano de Ayala, Vicario de la isla lo siguiente:
- «Manda el Cabildo ordenar a V. Md. dé todas las providencias conducentes a fin de que todas las Iglesias y Ermitas que fueran posibles hagan plegarías y rogativas fervorosas con procesiones generales de los Patronos y Abogados, para que ese templo de indignación divina; y, siendo el más eficaz medio para este efecto el que se depongan las culpas, se manda así mismo de fervorosas misiones». [Libro de Cartas del Cabildo 1720-1744. Año 1730…]
Y con la Virgen de los Dolores no se daba el caso de Patrona de la Ermita de San Roque. Es más, era una imagen nueva que la Ermita de San Roque había adquirido entre 1733 y 1738 después de empezados los volcanes.
Así la encontramos inventariada por primera vez, y como imagen nueva, en dichas cuentas aprobadas en 1738 y se escribe:
«Más un cuadro nuevo de Ntra. Sra. de los Dolores de vara y media de alto»
Y este cuadro continúa en Tinajo en 1792 describiendo el Retablo dorado de su Altar Mayor con las siguientes palabras.
Retablo dorado (1792):
«Al centro del retablo, la imagen de San Roque, a la derecha, Ntra. Sra. de Candelaria (de vestir), a la izquierda el Cuadro de Ntra. Sra. de los Dolores, un niño Jesús y el San Antonio de Talla». Libro de la Ermita de San Roque. Fol., 47]
A nuestro modo de ver, la razón que movió a dicho Franciscano a sacar en procesión de rogativas a la Virgen de Los Dolores sin ser patrono, fue el milagro que la Virgen había hecho en Yaiza en 1731 apagando aquel volcán de tres bocas cuando su lava llegaba a pocos a pocos metros de la puerta de su Iglesia.
Esta noticia, como es natural, corrió como pólvora por toda la isla. Y como el Franciscano no tenía cerca de la iglesia de Tinajo otra imagen de la Virgen que el cuadro de Los Dolores, lo sacó en procesión y la Virgen lo atendió.