Fuente: Agustín de La Hoz -Lanzarote
Sobre un extraño y espeluznante paisaje, entre verdes, ocres y negros, se nos mete por los ojos el caserío de Tinguatón, nada más ni nada menos que aprisionado por cinco cráteres, a saber: Tinache, Caldera Quemada, Uga, La Caldereta y Guiguan. La apariencia externa del pueblo no puede ser más humilde, aunque tras las paredes color de tierra haya quien discurra, con pasión y celo, delante de un montón de dinero.